La deuda renovable, un útil recurso
El concepto de “deuda renovable” no es muy empleado en el mundo bancario español. Se ha tomado directamente del concepto inglés “revolving debt”.
La deuda renovable se basa en la creación de una cuenta por parte del prestador (el banco) en la que no es necesario que el cliente pague la totalidad del dinero prestado y pueda seguir solicitando crédito.
El cliente debe pagar una cuota mínima con carácter mensual, basada en la cantidad pedida y en los ingresos del cliente.
El ejemplo más clásico y explicativo de este tipo de productos bancarios es el de la tarjeta de crédito, que permite a su titular seguir comprando aunque no tenga fondos en sus cuentas e ir satisfaciendo el dinero gastado en cómodas mensualidades.