Microcrédito en tu ayuda
Se estima que el 99% de las empresas de nuestro país son pequeñas y medianas empresas (PYMES), sumando más de 3.110.000 compañías y dando empleo a más de 9 millones de trabajadores. Estas empresas encuentran en los microcréditos y los préstamos rápidos una vía de financiación rápida en un contexto de desconfianza de los bancos y falta de financiación.
Los microcréditos le ofrecen la posibilidad de disponer de dinero de forma muy rápida y devolver en cuotas perfectamente asumibles dadas las necesidades de cada empresario.
En qué invertir un microcrédito
1. Pequeñas inversiones.
Renovar el mobiliario o el equipamiento tecnológico de nuestra empresa puede suponer un cambio muy significativo en nuestra actividad. Asegúrate de comprar equipos que vayas a poder aprovechar un largo tiempo. Es preferible gastar un poco más hoy que reinvertir en un par de años.
2. Reformas.
No es fácil asumir remodelaciones o lavados de caras para muchos pequeños empresarios. Estos microcréditos nos ayudarán a mejorar nuestra imagen.
3. Un plan de marketing.
No hay empresa que se precie por pequeña que sea que no disponga de una estrategia para darse a conocer. Y eso es el marketing. Desarrollar una página web, hacer campañas de publicidad en internet y gestionar los perfiles corporativos en nuestras redes sociales son en un mundo 2.0 como el nuestro la mejor carta de presentación. Y eso, obviamente, requiere una inversión.
4. Participación en ferias.
Forma parte de la estrategia de marketing más tradicional pero en muchos sectores es fundamental que otros profesionales del sector y posibles clientes te vean en este tipo de eventos. Aprovecha también ese crédito para hacerte con algunos artículos promocionales con los que atraer más clientes.
5. Incentivos al personal.
Los trabajadores motivados trabajan más y mejor. ¿Por qué no hacer un pequeño esfuerzo para recalcarles lo importantes que son para la marcha de tu empresa? A buen seguro que lo agradecerán.